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Si estás buscando una receta que sea un éxito seguro entre los más pequeños de la casa, entonces el arroz a la cubana es justo lo que necesitas. Este plato sencillo, delicioso y fácil de preparar es un favorito entre las familias, y no es difícil entender por qué. Con ingredientes básicos y una combinación de sabores que gusta a todos, el arroz a la cubana se ha ganado un lugar especial en nuestras mesas.
La historia del Arroz a la Cubana
Aunque su nombre podría sugerir que este plato proviene de Cuba, lo cierto es que el arroz a la cubana tiene una historia un tanto incierta y curiosa. El porqué se llama arroz a la cubana es un misterio tan grande como los nombres de ensaladilla rusa o filetes rusos, porque este arroz no procede de Cuba, o al menos conocido bajo este nombre. Parece ser de origen español, concretamente de Canarias, en los tiempos de la Cuba Colonial, donde se pudo importar.
Algunos dicen que fue una creación de los colonos españoles en Cuba durante la época colonial, mientras que otros creen que es un plato que se popularizó en España después de la independencia de la isla.
Lo cierto es que este plato ha viajado por el mundo y ha encontrado su hogar en las cocinas de diferentes países, adaptándose a los gustos locales y convirtiéndose en un clásico. La receta tradicional incluye arroz blanco, plátano frito, huevo frito y una salsa de tomate que lo cubre todo. A pesar de su simplicidad, el arroz a la cubana es una combinación de sabores que resulta irresistible.
¿Nos acompañas a descubrir la receta paso a paso?
Receta de Arroz a la Cubana
Ingredientes
- 2 tazas de arroz blanco
- 4 huevos
- 4 plátanos maduros
- Salsa de tomate casero
- 1 diente de ajo (opcional)
- 1 cebolla pequeña (opcional)
- Mantequilla
- Aceite de oliva
- Sal al gusto
Cómo hacer arroz a la cubana con plátano frito
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Cocinamos el arroz
- Primero, cocina el arroz. En una cacerola, añade las 2 tazas de arroz y 4 tazas de agua (la proporción suele ser 1:2).
- Agrega una pizca de sal y cocina a fuego medio-alto hasta que el agua empiece a hervir.
- Una vez que hierva, reduce el fuego al mínimo, tapa la cacerola y deja que el arroz se cocine hasta que toda el agua se absorba y el arroz esté tierno, aproximadamente 20 minutos.
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Preparamos la salsa de tomate
- Mientras el arroz se cocina, prepara la salsa de tomate.
- Si estás usando tomate natural, pica la cebolla y el ajo finamente.
- En una sartén, calienta un poco de aceite de oliva y añade la cebolla y el ajo.
- Sofríe hasta que la cebolla esté transparente, luego agrega el tomate triturado y una pizca de sal.
- Deja cocinar a fuego lento durante unos 10-15 minutos, removiendo de vez en cuando.
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Freímos los plátanos
- Mientras la salsa se cocina, pela los plátanos y córtalos en mitades a lo largo.
- En otra sartén, calienta mantequilla a fuego medio y fríe los plátanos hasta que estén dorados por ambos lados.
- Retíralos y colócalos en un plato con papel absorbente.
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- En la misma sartén donde freíste los plátanos, añade un poco de aceite de oliva y fríe los huevos.
- Lo ideal es que la clara quede bien cocida y la yema todavía líquida, ya que al romperse se mezclará con el arroz, aportando cremosidad al plato.
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- Finalmente, sirve el arroz en platos individuales, añadiendo un plátano frito y un huevo.
- Cubre el arroz con un poco de salsa de tomate, y si lo prefieres, puedes añadir un poco de perejil picado o menta para darle un toque fresco.
Consejos para preparar el mejor Arroz a la Cubana
Aquí van algunos consejos para que tu arroz a la cubana salga perfecto cada vez:
- El arroz: Un truco para añadirle un poco de sabor al arroz blanco es freír un diente de ajo con piel en un poco de aceite. Luego añade el arroz y mézclalo bien. Sazona y finalmente añade el agua, dejando el diente de ajo mientras el arroz cuece ¡verás qué rico!
- Los plátanos: Es mejor usar plátanos maduros pero firmes. Si están demasiado maduros, se desharán al freírlos.
- La salsa de tomate: Si tienes tiempo, prepara la salsa de tomate casera, ¡notarás la diferencia! Añadir un poco de azúcar puede ayudar a equilibrar la acidez del tomate.
- El huevo: Si a los niños no les gusta el huevo con la yema líquida, cocínalo un poco más hasta que esté completamente hecho.
- Acompañamientos: Aunque el arroz a la cubana es un plato completo por sí solo, puedes acompañarlo con una ensalada fresca o unas rodajas de aguacate para hacerlo aún más nutritivo.
Preguntas Frecuentes sobre el Arroz a la Cubana
¿Es el arroz a la cubana adecuado para niños pequeños?
¡Sí! El arroz a la cubana es un plato muy adecuado para niños, ya que los ingredientes son suaves y fáciles de masticar. Además, es una excelente manera de introducir a los niños a sabores nuevos como el plátano frito.
¿Puedo hacer el arroz a la cubana sin huevo?
Por supuesto. Si alguien en tu familia no consume huevos, puedes omitirlos o sustituirlos por una proteína vegetal, como tofu salteado. Otra opción es agregar más plátano o incluso un poco de queso fresco.
¿Cómo puedo hacer la versión vegana de arroz a la cubana?
Para una versión vegana, simplemente sustituye el huevo por tofu revuelto o por rodajas de champiñones salteados. También asegúrate de usar una salsa de tomate que no contenga productos animales.
¿El arroz a la cubana es un plato saludable?
El arroz a la cubana puede ser bastante saludable si se prepara con moderación en el uso de aceite y se acompaña de una ensalada o verduras frescos. Al incluir arroz, huevo, plátano y tomate, ofrece un buen equilibrio de carbohidratos, proteínas y vitaminas.
Beneficios nutricionales del Arroz a la Cubana
El arroz a la cubana, además de ser delicioso, también es un plato bastante nutritivo, especialmente cuando se prepara con ingredientes frescos y de calidad.
El arroz blanco es una excelente fuente de energía, ya que es rico en carbohidratos. Aunque se le ha quitado la cáscara, lo que reduce su contenido de fibra, sigue siendo un alimento básico en muchas dietas alrededor del mundo. El arroz es fácil de digerir y es perfecto para los niños, ya que no suele causar alergias y es suave para el estómago.
El plátano es una fuente rica en potasio, vitamina C y vitamina B6. Además, los plátanos contienen fibra, que es importante para la digestión. Los plátanos fritos en el arroz a la cubana añaden un toque dulce que contrasta perfectamente con la salinidad del huevo y la acidez de la salsa de tomate, haciendo que el plato sea más equilibrado en sabor.
El huevo es uno de los alimentos más completos que existen. Es una excelente fuente de proteínas, vitamina D, vitamina B12 y selenio. Los huevos también son ricos en colina, un nutriente esencial para el cerebro. Los huevos fritos, cocinados a la perfección, con una yema líquida que se mezcla con el arroz, los huevos en el arroz a la cubana son simplemente irresistibles.
Finalmente la salsa de tomate, especialmente si se hace en casa con tomates frescos, es una excelente fuente de antioxidantes como el licopeno, que se ha relacionado con la reducción del riesgo de enfermedades del corazón y ciertos tipos de cáncer. Además, los tomates son ricos en vitamina C y vitamina K.
Para quienes buscan una receta sencilla y adaptable, el arroz a la cubana es perfecto. Es un plato que todos en la familia pueden disfrutar, y lo mejor de todo es que se puede personalizar fácilmente para satisfacer diferentes gustos y necesidades dietéticas. Así que, la próxima vez que no sepas qué preparar para la comida o la cena, ¡el arroz a la cubana puede ser la solución ideal!
5 comentarios
daniel jose
una receta que se usa mucho para un apuro pero es super bueno y facil de preparar fritar platanos en tajadas cocinar el arroz y fritar un huevo de verdad que esta receta la adoro y se puede combinar muy bien con una sopita
Cristopher
Uff sabroso y sensillo eso es lo mejor muy buena receta.
efrain
muy buena receta a mi familia le encanta este arroz
Keli Andrés
Sin duda alguna el plato más rápido que he visto, sin muchas palabras para el comentario.. Que lo disfruten
Julia Ruiz Rv
A mi pequeño le encanta! Yo hago los huevos a la plancha sin aceite y los plátanos los aso al horno siempre que puedo para que no sea tan aceitoso. Este plato nunca pasa de moda.